Antes, durante y después del ejercicio tu cuerpo necesita de energía, para funcionar correctamente e incluso quemar calorías.
El Colegio Americano de Medicina lo recomienda para maximizar el rendimiento y mejorar la recuperación. Además recuerda que el 60 por ciento de tu cuerpo, está compuesto de agua y cuando realizas esfuerzos continuos pierdes líquidos importantes, por lo que es vital reponerlos. Para quemar calorías eficientemente es vital “llenar tu tanque de combustible”, según la American Heart Association, lo que además permitirá que te ejercites sin arrastrarte por la fatiga al finalizar.
Aliados
Ahora que ya sabes lo importante de nutrir e hidratar al organismo, realiza las selecciones precisas en el momento adecuado:
- Antes: debes ser un snack ligero, apuesta por una taza de fruta con ½ taza de yogur griego, el cual gracias a los probióticos que posee, disminuye la inflamación y equilibra la flora intestinal, factible de afectaciones por el estrés físico que genera el ejercicio. Si sólo tienes unos minutos selecciona un plátano. Pero nunca te ejercites con el estómago vacío.
Tomar un té matcha con leche de almendra, te brinda un shoot de energía que mejorará tu desempeño hasta en un 25 por ciento, además ayuda en la quema de grasa y a tonificar los músculos mientras prácticas.
- Durante: si tu entrenamiento dura entre una y dos horas, no es necesario consumir alimento alguno; pero si rebasa este lapso de tiempo, puedes recurrir a un licuado con proteína en polvo, el cual contiene todos los aminoácidos necesarios para el cuerpo; agrega también fruta y nueces, lo que mantendrá estables tus niveles de energía durante la práctica, para hacer crecer los músculos en combinación con ejercicios de resistencia.
En cuanto al líquido, es importante hidratar y el agua de coco se convierte en una elección perfecta, por su aporte de electrolitos, los cuales te ayudará a recuperar lo que pierdas con el sudor. Por regla general sin importar el tipo de ejercicio, se sugiere beber líquidos cada 20 minutos.
