Desde niña lo consumo, ya que mi papá preparaba un delicioso guacamole los fines de semana. Cuando hice dietas le temía, pues los nutriólogos por lo regular lo restringen a tres rebanadas. Sin embargo, al paso de los años he aprendido, no sólo que es una fruta y verdura, que posee grasas buenas que ofrecen un cúmulo de bondades para nuestra salud, que te voy a describir.

Sabías que…

  1. Tiene potasio que te ayuda a mantener estable la presión arterial.
  2. Gracias a la luteína absorbe las ondas de luz que podrían ser dañinas para la visión.
  3. Optimiza el funcionamiento del sistema nervioso por el magnesio que contiene.
  4. Regula los niveles de azúcar en la sangre.
  5. Limpia el intestino y elimina el mal aliento.
  6. Es rico en fibra, así que evita el estreñimiento y brinda saciedad.
  7. Sus grasas buenas son aptas para quemar grasa del cuerpo.
  8. Disminuye los riesgos de sufrir depresión pues tiene ácido fólico.
  9. Te brinda energía por su gran variedad de vitaminas del tipo B.
  10. Como es un eficiente antioxidante protege de los efectos nocivos de la contaminación y el sol, por lo que previene el envejecimiento prematuro.