Según el Dr. Eric Olson, experto del Centro para Medicina del Sueño de Mayo Clinic en Rochester, Minnesota, “la imposibilidad de dormir puede ser agotante y frustrante para una persona, además de drenarle toda la energía e ir de la mano de problemas como depresión, dolor crónico, susceptibilidad a enfermar, presión arterial alta y más riesgo de sufrir accidentes”.
Además, al no descansar también se reflejará en tu piel, que lucirá opaca e incluso provoca que se marquen las arruguitas o líneas de expresión. Pero, los inconvenientes no terminan aquí, también se ha demostrado que al no dormir lo suficiente también se altera tu estado de ánimo.
Una investigación publicada en el Journal of Applied Social Psychology, indica que las malas posturas al dormir, perjudicarán tu estado de ánimo al despertar. Descubre que estás haciendo mal y que puede ser un detonante para un descanso inadecuado por las noches:
- Boca abajo: según especialistas del Colegio de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid, perjudica la espalda, pues tensa los músculos del cuello y la zona lumbar, debido a que la columna se arquea.
- Dormir de lado: al hacerlo con las rodillas flexionadas al pecho, de forma exagerada, se registra una flexión en la espalda baja, según el Better Sleep Council Canada.
- Con un brazo en la cabeza: afecta los músculos de tu espalda y cuello.
La mejor posición es boca arriba con una almohada que no sea plana o muy alta.
A veces, las pastillas para dormir pueden ser un componente eficaz de la terapia para el sueño; pero deben consumirse con cuidado y siempre bajo estricta revisión médica. Pues a la larga generan efectos secudarios.