¿Últimamente te sientes irritable, cansada y sin ganas de nada? Probablemente el estrés que ha generado el aislamiento, sea el responsable. Pero, es fácil lograr el balance en la vida. Recuerda que los pequeños detalles son la clave de la vida:

  • Limita tu ingesta de carbohidratos y productos azucarados, pues incrementan los niveles de azúcar en la sangre, provocando la liberación de cortisol y adrenalina, que bloquean la generación de triptófano, por lo cual no podrás relajarte.
  • Incluye en tu régimen alimentos ricos en magnesio, que relajan el sistema nervioso. Encuéntralo en el cacao, aguacate y cacao.
  • Elevar los niveles de serotonina, también es clave para incrementar la sensación de bienestar y mantener la calma ante situaciones estresantes. Búscalo en nueces, huevos y piña.
  • Por las tardes, cuando sientas que la energía se agota, toma un refrigerio con proteína como un yogur con frutos rojos, pues de acuerdo con un estudio publicado en Science Daily, mejoran tu memoria.
  • Bebé una taza de té de lemon balm, que también tiene efectos relajantes.
  • Siéntate a ver una película divertida con tu familia, se ha comprobado que la risa provoca la liberación de endorfinas, que logran se mejore notablemente tu estado de ánimo.
  • Acariciar a tu mascota eleva los niveles de oxitocina, lo cual provocará que te sientas de mejor humor.

Dormir al menos ocho horas es esencial, para que tu cuerpo se repare y te sientas con energía al despertar.