Sin lugar a dudas durante una travesía en avión, auto o tren, tendrás algún antojo, pero la idea no es que te sientas mal, por ello debes evitar los alimentos chatarra que tienen grasa y que pueden provocar alteraciones estomacales.

Lo ideal es seleccionar alternativas nutritivas que te ayudarán a elevar tus niveles de glucosa en la sangre, durante ese lapso, por lo que te mantendrás alerta y no terminarás tu travesía con dolor de cabeza.

  • Prueba a llevar un sándwich de pan integral con mantequilla de cacahuate o incluso puede ser de almendras. Contiene proteínas que mantendrá estables tus niveles de azúcar en la sangre. A mí no me gusta comer el pan remojado, así que otra opción puede ser sustituir el pan por galletas habaneras o integrales. Ninguna de las dos versiones necesita refrigeración.
  • Una bolsita con frutos secos, obrará maravillas. Pues saciará rápidamente tu hambre, gracias a que poseen proteínas. Te aseguro que no aterrizarás hambrienta. Además son una fuente de omega 3, que mejora la calidad del sueño, así que no los conviertas en tus favoritos sólo para los viajes. Si lo deseas puedes añadirle algunos arándanos secos para darle un sabor dulce, que también previene los picos altos de glucosa y mantiene estables los niveles de presión. Incluso la Universidad de Florida los sugiere a diario para evitar la presión alta. 
  • Lleva una barra de avena, es una excelente opción para saciar el hambre y es fácil de digerir. Incluso evitará que sufras de estreñimiento, un efecto común cuando viajas por el simple y sencillo hecho de cambiar de rutinas.
  • Una verdura o una fruta con trocitos de queso es una excelente opción. Apuesta por cuadritos de queso gouda o manchego que no derramarán líquido y se mantendrán en buenas condiciones hasta por 12 horas. Combínalos con zanahorias o una manzana. En conjunto son una excelente dotación de fibras y proteínas para mantenerte saciado hasta que llegues a tu destino final.