Al caminar y conforme crezca será más independiente y además gritará, lanzará objetos, romperá tus delicadas flores, pateará, lanzará la comida e incluso no dormirá mucho. Sí es verdad, hasta el perro correrá a esconderse debajo de la cama en cuanto lo vea aparecer, después del primer año.
Recuerda que ellos te observan todo el tiempo y aprenden de lo que ven, por ello es importante mantener el control. Te vamos a dar algunos tips para que aligeres tu estrés y no explotes a la menor provocación.
Tiempo a solas
Es agotador atenderlo todo el tiempo, necesitas buscar un tiempo a diario para pasarlo a solas. Si puedes plática con una amiga, aplica una mascarilla sobre tu reseco cabello o simplemente sal de casa por unos minutos para disfrutar de un café. Te permitirá recuperar energía para continuar con la desgastante jornada junto a un niño que no se le acaba la pila.
![](http://www.cecyvaldezdailystyle.com/wp-content/uploads/2020/02/01-7.jpg)
No te salgas de la rutina
Los pequeños las necesitan en sus vidas, porque les brindan seguridad, aunque ya no es un bebé necesita horarios fijos para comer, jugar, dormir y bañarse. Tú eres el adulto, así que necesitas indicarle cuando se terminó el tiempo de brincar y es momento de bañarse para dormir. Al seguirlas conseguirás que se muestre menos irritable.
Recarga baterías
Necesitas dormir entre siete y ocho horas para renovar fuerzas para el día siguiente. Cuando no descansas lo suficiente experimentas problemas con tu estado de ánimo, la memoria e incluso se desencadena ansiedad. Si una tarde duerme la siesta y tú necesitas una, está permitida para ti también, te sentirás llena de vida, aunque sólo tomes 10 ó 15 minutos de descanso.
Busca refuerzos
Tal vez no lo has considerado, pero llevarlo a jugar al parque le permitirá aprender a socializar con otros niños y también lo cansará. Poco a poco disminuirán sus ataques de agresividad conforme descubre cómo comunicar sus sentimientos y le restará energía por lo que regresará a casa tranquilo y cansado.