¿Sabías que la piel es el órgano más grande que poseemos? Cuenta con una superficie de dos metros cuadrados con un peso aproximado de cinco kilogramos.

 Es una barrera de protección, por lo que actúa como un receptor del estrés y lo refleja en el interior, ya que hay una conexión cerebro-piel, que ante las crisis activa los sistemas endocrino e inmune, de acuerdo con los expertos. También genera problemas intestinales.

Cuando hay estrés crónico, el cuerpo libera cortisol para lidiar con el problema, pero tras largos períodos causa estragos en la dermis, es decir, la piel expresa lo que la mente calla.

Impactos psicológicos en la piel

  • Hiperhidrosis, es la sudoración excesiva o incontrolable, que no está relacionada con la temperatura corporal o el ejercicio. Una reciente investigación reveló que hay un vínculo entre la depresión y la sudoración excesiva, de quienes lo padecen.
  • Acné, se suscita cuando los poros se bloquean por el exceso de grasa, células muertas y suciedad, lo que provoca inflamación. La ansiedad causa inflamación crónica y niveles altos de cortisol, que generan que las glándulas sebáceas produzcan más grasa espesa y en conjunto con las células muertas tapan los poros.
  • Psoriasis, por lo regular las personas que la padecen tienen un sistema inmunológico alterado y al reaccionar al ambiente produce inflamación, además de un exceso de células que se acumulan en la superficie con lo que se forma placas, que son mejor conocidas como brotes de psoriasis.