De acuerdo con el cirujano plástico Juanjo Duque, son una serie de procesos estéticos que, sin la necesidad de ingresar a un quirófano, brindan volumen, definición o esculpen esos rasgos poco marcados o inexistentes en el rostro del paciente. Los ejemplos más claros donde se efectúa son mentón, nariz, cuadrantes maxilofaciales, pómulos y labios.
En su práctica el Dr. Duque respeta el genotipo de los pacientes, es decir, su carga genética y la estructura de su cuerpo, y se dedica a buscar una armonía a través de los fenotipos, que son los efectos ambientales y exteriores que marcan ciertos detalles en el rostro de los pacientes. La idea es respetar el rostro para evitar un cambio drástico y no favorable, y resaltar esos detalles a través de inyecciones de ácido hialurónico, que es una sustancia que se encuentra dentro del cuerpo y que es bio compatible con el organismo. En pocas palabras transforma esas partes que necesitan afinarse.
Acción precisa
El procedimiento estético se realiza con ayuda de tres diferentes tipos de ácido hialurónico y la ejecución toma de dos a tres horas. Es indoloro, gracias al uso de la anestesia tópica que se aplica en la piel, y su aplicación es a través de agujas ultra-fine. Lo mejor es que no requiere etapa de recuperación, lo que significa que la persona puede incorporarse a sus actividades de manera inmediata.
El costo de este tratamiento es personalizado ya que se debe valorar clínicamente la dosis de ácido hialurónico o colágeno líquido necesarios. El Dr. Juanjo Duque siempre respeta la base de los ojos y de los labios, además de la forma primaria de la nariz, porque no efectúa correcciones basadas en ambos.
La idea es que se tenga un rostro más femenino o masculino, según el paciente quiera, que proyecte una simetría agradable y sobretodo que ofrezca seguridad en sí misma a la persona. Más detalles en su Facebook: @drjuanjoduque