En las mujeres la alopecia androgenética se caracteriza por un adelgazamiento del cabello, seguida de pérdida de cabello intensa en la parte superior de la cabeza. No te asustes, pues no hay posibilidades de que te quedes calva. Suele presentarse en la adolescencia y la menopausia, de acuerdo con Harvard Medical School. Sin embargo, también un período de estrés intenso o una cirugía pueden provocar caída de cabello excesiva.
Existen algunas soluciones que pueden ser de gran ayuda:
- Asegúrate que tu dieta esté balanceada e incluya proteínas, carbohidratos complejos, vitaminas y minerales. Integra proteínas como la carne o legumbres. Requieres vitamina A para asegurar que los nutrientes esenciales se mantengan en el cuerpo, búscala en zanahoria, pimientos o naranjas; vitamina B6 que es indispensable para asegurar que los folículos pilosos reciban suficiente oxígeno, búscala en frutos secos y verduras de hoja verde. Vitamina E que se encarga de suministrar sangre al cuero cabelludo, las almendras y avellanas son una fuente.
- Prepara una mascarilla de sábila, sólo tienes que partir por la mitad una rama, raspar la babita resultante y untar sobre las raíces, dejar reposar toda la noche y enjuagar al día siguiente. Lo ideal es realizarlo dos veces por semana.
- Enjuague de té de regaliz, es eficiente para fortalecer los folículos pilosos debilitados, que pueden ser los causantes de la pérdida de cabello. Sólo tienes que poner una bolsita en una taza de té y frotar el líquido cuando esté tibio en el cuero cabelludo. No es necesario enjuagar.
- Jugo de cebolla, porque optimiza la producción de colágeno, aumenta la circulación sanguínea y además es antibacteriano. Un estudio publicado en Journal of Dermatology, comprobó que tiene resultados efectivos para controlar la caída recurrente. Es necesario frotar dos veces por semana en el cuero cabelludo y lavar después de 20 minutos de la forma habitual.
