Como lo lees, este sencillo ritual de belleza no sólo logrará que la piel de tu cuerpo se vea radiante, también ofrece otros frutos:

  1. Elimina las toxinas, al masajear remueve nódulos linfáticos y optimiza el sistema linfático, que evacuará líquidos y lo que el cuerpo ya no necesita.
  2. Optimiza el flujo sanguíneo, al mejorar esta función corporal aumenta el suministro de oxígeno y nutrientes a las células para eliminar desechos metabólicos, con lo que se reducen las probabilidades de sufrir de venas varicosas.
  3. Reduce la aparición de celulitis, es el resultado de agilizar la circulación y desecho de toxinas.
  4. Actúa como una exfoliación, al barrer las células muertas y destapar los poros, lo que facilita la penetración de productos hidratantes y tratamientos.
  5. Disminuye la flacidez, pues favorece la tonificación de los músculos.
  6. Alivia la tensión corporal que genera el estrés.

Cómo hacerlo

  • Es necesario usar un cepillo de cerdas naturales.
  • Aplicarlo sobre la piel seca, antes de entrar a la ducha.
  • Iniciar con movimientos circulares ascendentes desde los pies hasta llegar al cuello.
  • Al llegar al abdomen realiza un círculo en la misma dirección que las manecillas de un reloj.
  • Debes omitir el busto.
  • Durante 15 días efectúalo a diario y después cada tercer día.