Es indispensable emplear un tratamiento hidratante regularmente, sin embargo, no hacerlo con los cuidados precisos puede generar resultados nulos. Te voy a contar los secretos de la hidratación:

  • Antes de tocar el rostro es vital que laves tus manos perfectamente, para evitar contaminar productos cosméticos.
  • Limpia la piel de toxinas, polvo o productos cosméticos antes de iniciar tu rutina de hidratación.
  • Es necesario realizar tanto la limpieza como la hidratación dos veces al día, es decir, de preferencia por la mañana y antes de acostarte.
  • Lo ideal por la mañana es aplicarla, inmediatamente después de salir de la ducha, para aprovechar que los poros se abrieron por el vapor y lograr que penetre a profundidad.
  • Después de los cuarenta años se sugiere también la asistencia de suero, que reforzará la barrera de humectación. Debes esparcirlo antes de tu crema hidratante.
  • En el caso de sequedad extrema, es necesario que selecciones un hidratante con ingredientes altamente humectantes, como aceite de argán, aceite de semillas de uva o aceite de rosa mosqueta. ¿Cuáles son los síntomas de una dermis deshidratada? Presenta picazón, escamas en algunas zonas como mejillas, además de tirantez.
  • No importa, que tengas piel grasa, también requiere de humectación. Sólo es cuestión de elegir una fórmula que sea libre de aceites y evita las excesivamente untuosas, para evitar que se congestionen los poros. Prefiere las de textura líquida.
  • Si tu producto no tiene dosificador, lo ideal es tomar una pequeña cantidad similar a un frijol, con la ayuda de una palita, para evitar llenar de bacterias el producto.
  • Aplica una gotita en cada mejilla, el mentón, la frente y la nariz, después desliza del centro hacia las sienes, con la ayuda de las yemas de los dedos.
  • Recuerda aplicar también en el cuello, pero en este caso con movimientos ascendentes.
  • Prohibido frotarla, pues sólo conseguirás debilitar las fibras de colágeno y que tu cutis pierda la turgencia.
  • Los ojos también requieren de hidratación, en este caso lo más recomendable es usar un producto para la zona, ya que están formulados para tratarla con mayor hidratación, pues carece de glándulas sebáceas. Ten cuidado al esparcirla, en este caso debes realizarlo con pequeños toques