Seguro has experimentado días en que simplemente sientes que no tienes fuerza para moverte o incluso continuar con la jornada. Lo peor, es que detenerte a descansar no provee resultados positivos.

De acuerdo con los psicólogos puedes estar llenando tu vida de acciones que sólo restan energía y que generan esos estados de agotamiento que son continuos. Además grandes dotaciones de energía tampoco son la solución, sino es la adecuada.

¿Sabías que a pesar de que tu cerebro sólo ocupa el 4% de tu peso corporal, usa el 20% de la energía que recibes para funcionar? Así que si estás lista, vamos a descubrir esas pequeñas cosas que roban tu energía:

  • Exceso de información, actualmente estamos sujetos a disparos de información que proviene del internet, redes sociales, la televisión e incluso periódicos y revistas. Toda esa gran cantidad de información que recibes tarda un mayor tiempo en ser procesada, lo que genera mala toma de decisiones y hasta estrés. Lo ideal es que te desconectes de ese bombardeo y que tomes tiempo al aire libre, para clarificar tu energía.
  • Estrés, lentamente consume tu energía, recuerda que la producción de cortisol se incrementa que altera las respuestas del sistema inmune, suprime el sistema digestivo, además genera miedo. A largo plazo esa alerta de huida que genera altera los procesos del cuerpo y suele provocar depresión, dolores de cabeza, falta de concentración, según reportes de Mayo Clinic.
  • Rutina, puede ser buena cuando se trata de hábitos positivos como no saltarse las comidas, si no comes adecuadamente la fatiga es uno de los síntomas. Sin embargo, al permanecer siempre en el mismo círculo evita que te salgas de tu zona de confort lo que suele ser una limitante para la creatividad y vuelve tu vida aburrida. Así que te sugiero que te animes a explorar.
  • Vivir los sueños de otros,  muchas veces se persiguen para tratar de formar vínculos, mantener relaciones. Desafortunadamente apagan las chispas de la pasión, provocan agotamiento pues nunca terminarás de vivir la vida de otros. Lo mejor, es que saques tus talentos, los explotes o descubras cuáles son los que te emocionan, te sentirás revitalizada.