Existen varios motivos para mantenerte hidratado, conócelos:

  • Para las personas que entrena es una gran aliada, ya que maximiza el rendimiento físico, ya que al perder agua puede sentir fatiga, e incluso reduce el estrés oxidativo que genera cuando se realiza una rutina de alta intensidad.
  • Mejora la digestión, al agilizar los movimientos intestinales. De hecho, cuando hay un bajo consumo de agua, es probable que se presente estreñimiento.
  • Es excelente para evitar el incremento de peso, ya que brinda saciedad al tiempo que optimiza el funcionamiento del metabolismo. Por ello, los nutriólogos sugieren beber un vaso de agua, 15 minutos antes de las comidas, de acuerdo con un estudio publicado en Elsevier.

Ante una deshidratación leve podrían verse afectados algunos de los aspectos de la función cerebral, lo que suele generar dolores de cabeza. También se ha demostrado que reduce la memoria y afecta el estado de ánimo.

¿Alguna vez has pensado en el café o té como hidratantes?

Ambos tienen poderes deshidratantes, lo que podría ocasionar un efecto contrario al que persigues, es decir podrían deshidratarte si los consumes como tu único líquido.

Sin embargo, no hay que exagerar una taza de café, podría contar como líquido, pero equivale sólo a medio vaso de agua. Tal vez por ello has notado que se deshidratan tus labios o lucen agrietados cuando consumes una jarra de café.


Por su parte, el té, especialmente el negro no es significativamente diferente al agua. Sin embargo, posee antioxidantes que lo convierten en un excelente aliado para bajar los niveles de colesterol, de acuerdo con un estudio publicado por Oxford Academic.

Por lo tanto, tal vez podrías incluir una taza de café o de té, en tu conteo de líquido diario, recuerda que nada con exceso y todo con medida. Otro detalle a considerar es que no debes adicionarlos con azúcar a añadirles crema, ya que ambos le añaden calorías a ambas bebidas.