¿Últimamente sientes que no descansas por las noches? Probablemente lo que cenaste sea la razón por la que el sueño se esfumo. Tras una cena calórica con los amigos, es frecuente que llegues tarde a casa con la firme intención de tirarte a dormir. Te pones la pijama, apagas la luz, entras a tu cama, te acomodas y que sucede han pasado 15 minutos y no has podido conciliar el sueño. Pasan 30 minutos y nada. Empiezas a dar vueltas en tu cama sin poder dormir, viendo el techo y pensando; ¿qué está pasando? ¿Por qué a mí? Y en ese momento recuerdas ese suculento carajillo y el tiramisú que cenaste y de repente, caes en cuenta que no vas a poder dormir durante un buen rato gracias a ese delicioso postre. ¿Pero sabes a que se debe esta situación? ¿Has notado que algunas noches es más difícil conciliar el sueño?

Emma Colchones, los más premiados de Europa te explican qué ocurre:

  • Durante el día solemos ingerir cualquier tipo de alimento sin ser conscientes que algunos de ellos podrían estar alterando nuestro sistema nervioso al momento de conciliar el sueño.
  • Las hormonas y neurotransmisores pasan por un proceso de alta estimulación gracias al consumo de alimentos altos en contenidos energéticos, cafeína y azúcares.
  • Aquellos alimentos que poseen altos niveles de cafeína, suelen ser un estimulante para el Sistema Nervioso Central, que provoca estímulos psíquicos a través del aumento de la disponibilidad de glucosa para el cerebro, además de bloquear los receptores de adenosina, un químico cerebral encargado de regular la somnolencia.
  • La ingesta de alimentos como el café, chocolate, té verde, guaraná, bebidas energéticas o incluso alimentos ricos en carbohidratos provocan una lenta digestión, por lo que, si deseas tener un sueño profundo y de buena calidad, debes evitarlos a toda costa.

Los expertos sugieren omitir el consumo de este tipo de alimentos por lo menos cuatro horas antes de ir a la cama. Es aconsejable no comer entre la cena y la hora de irse a dormir y si nos aborda la sensación de apetito es mejor optar por unas galletas de salvado de trigo, un yogurth descremado o una pieza de fruta.