El cambio de temporada y de horario provocan que las noches sean más frías. En invierno los patrones del sueño se ven afectados ya que es la temporada que llega con las noches más largas y más frías, pues con el cambio de horario llega más temprano que en los meses de verano. Además, es la época en donde tendemos a extender nuestro tiempo envueltos en las cobijas por la baja en la temperatura.

Por la noche la temperatura corporal central desciende y una de las funciones de nuestro ritmo circadiano, que son oscilaciones y ritmos biológicos que se repiten aproximadamente cada 24 horas.


El núcleo supraquiasmático es el centro principal de regulación de los ritmos circadianos, es conocido como nuestro reloj maestro interno o como el marcapasos central, ya que se ocupa de sincronizar los diversos ritmos periféricos con los estímulos externos que le informan sobre los cambios de luz y de grados generados. Por lo que una caída en la temperatura corporal central le avisa que ya es momento de dormir y nos ayuda a conciliar el sueño y mantenerlo.


Por lo tanto, es recomendable que durante la época de frío te abrigues antes de ir a la cama para mantener una alta temperatura, ya que de lo contrario para tu cuerpo será complicado pues los vasos sanguíneos se encogen y no quieren renunciar al calor.

Mantener una temperatura ideal en la habitación, aparte de abrigarte, también es bueno para conservarte calentita mientras duermes, ya que el calor proveniente del cuerpo se disipa más fácilmente. La Fundación del Sueño compartió en un artículo que la mejor temperatura del dormitorio para dormir es de aproximadamente 65 grados Fahrenheit o 18.3 grados centígrados.


«Es importante elegir ropa de dormir que sea cómoda y transpirable, ya que los materiales usados pueden ayudar a controlar la temperatura corporal. Es esencial que el tejido sea apropiado para la estación y la temperatura ambiente. Aprovecha las noches de invierno más largas, cuando nos cansamos más temprano para dormir lo suficiente. Las vacaciones de Navidad son el momento perfecto para dormir y comenzar la mañana lentamente después de noches festivas con amigos y familiares. Te lo has ganado» asegura la Dra. Verena Senn, Neurobióloga y Jefa de Investigación del Sueño en Emma – The Sleep Company.